martes, 26 de marzo de 2013

La apertura internacional (1951-1956)

El régimen de Franco permaneció inalterable a cualquier suceso externo, como el de la guerra fría. Con esta guerra, la dictadura franquista fue considerado un aliado de Europa, ya que los fascistas eran perdonados con tal de que fuesen anticomunistas. Aunque primeramente los EEUU se negaban a que Franco participase en las decisiones, tras la inminencia de la guerra de Korea, accedieron a considerarlo aliado.

El régimen fue respaldado por la Iglesia, porque durante la República la Iglesia se vio afectada duramente por un anticlericalismo muy fuerte. La Iglesia española se distanció de la europea, pues el Vaticano consideraba que los españoles mezclaban los asuntos religiosos con los ideológicos. Los clérigos más rebeldes a la causa de Franco eran los vascos y catalanes. Tanto Franco como Pío XII se mantuvieron intransigentes a esta muestra de rebeldía. 


Los nazis quisieron realizar un pacto cultural con España pero los españoles se negaron al considerarlo una humillación de la conciencia religiosa porque Alemania tenía poca conciencia religiosa. En España la educación se regía en los valores cristianos. Ante la creciente inestabilidad con el Vaticano, se efectuaron numerosos tratados para evitar todo conflicto con lo que Franco logró una de sus objetivos: nombrar obispos.

La situación de aislamiento por parte de España hacia el resto del mundo hizo que Franco contactase con el Vaticano y con los EEUU para establecer numerosos pactos. Los pactos con los Estados Unidos hicieron que la moral republicana cayese en picado. Uno de ellos consistía en permitir el establecimiento de cuatro bases militares en España a cambio de multitud de ventajas. A los falangistas esto no les gustaba demasiado, pero Franco les ignoró al tener un papel sumamente secundario. Tras esto se levantó la sanción que impedía que España colaborase con la ONU y el resto de organizaciones relacionadas. Además de la importancia de EEUU, también la tuvo la ayuda argentina y el acercamiento de los países árabes.

                                                                                                     
                                                                              Franco con el presidente de EEUU, Eisenhower

Dentro de España, se creó un instituto de la cultura hispánica, para mostrar una alternancia ideológica al régimen. Los falangistas  demandaban una revolución social que Franco no permitió que se llevase a cabo. Por esta negativa también se reunieron después personas de toda ideología (derechistas inconformistas y algunos izquierdistas) apoyados por el SIndicato Español de Universitarios para ir en contra de determinados aspectos del régimen franquista.

Aislamiento y resistencia (1945-1950)

Europa estaba liberada para la democracia, tras las derrotas de la Alemania nazi y la Italia fascista en la segunda guerra mundial, por lo que no había sitio en las Naciones Unidas para un régimen fascista como el franquista. A España tampoco se le incluyó en el plan de fondos para la reconstrucción de los estados afectados por la guerra. En definitiva España queda aislada del resto de países porque Franco era considerado por las potencias un peligro para la paz mundial.

En España se llevaron a cabo manifestaciones contra la decisión de la ONU protestando por el aislamiento  y por las ganas de una mayor participación internacional. Un caso especial de la aplicación del aislamiento a España fue el de la Unión Soviética, que la aisló de manera exterior pero que subvencionó a grupos guerrilleros contra el fascismo en su interior.

Ante esta situación crítica del estado español internacionalmente, Franco critica a los que abandonaron el poder sin luchar como Primo de Rivera, su aliado Mussolini, Alfonso XII. En estos años también hay conspiraciones entre republicanos y monárquicos en Londres para intentar encontrar una alternativa al régimen dictatorial.

Algunos militares de la CEDA se unieron al gobierno menos su fundador Gil Robles que apoyaba al heredero legítimo de Alfonso XII don Juan.

España sigue a una democracia orgánica parecida al corporativismo cristiano de los años 30. La falange ya no tenía la importancia de antes, pero Franco se negó a prescindir de ella porque así permanecían los ideales perseguidos al estallar la guerra civil.

La pequeña estabilidad española se vio alterada porque Don Juan desató tensiones con su traslado a Estoril desde Suiza y con sus críticas y comentarios con desdén hacia el caudillo. Con la ley de sucesión Franco quedó como regente perpetuo y el mismo se encargaría de encargar al monarca que le sucedería y este tendría que cumplir los siguientes requisitos: varón,  católico, mayor de 30 años, y debe aceptar las leyes fundamentales y jurar y seguir el movimiento nacional. Dados estos requisitos, el príncipe Juan Carlos, hijo de don Juan se trasladó a España para educarse y posicionarse como principal sucesor de Franco, pero el caudillo, ante la mala relación que tenía con el padre del príncipe siempre dijo que los hijos del hermano de don Juan, el sordomudo, podrían ser también herederos del trono.

Franco siguió un nacional-catolicismo lo que refleja que la fe católica, fue la ideología dominante en el estado franquista. Es por esto que la educación se enmarcó en una interpretación dogmática de la fe cristiana.
Los años 40, se consideran como la época del hambre en España. El racionamiento se extendió hasta los años 50 lo que provocó muchos muertos. Las consecuencias que desencadenó fueron la expansión de enfermedades como la tuberculosis, el contrabando de alimentos (estraperlo) y el crecimiento vegetativo se frena. Lo peor lo pasaron las clases más bajas aunque las clases medias que se habían empobrecido se vieron también afectadas. Por último el éxodo rural provocó el descenso de la producción agrícola y un aumento del chabolismo en las afueras.

 Ante la situación de pobreza extrema, Argentina cuyo presidente electo era admirador de Franco, ayudó a España con exportaciones, no cumpliendo lo que había dictado la ONU. Esta ayuda fue un balón de oxígeno para paliar las deficiencias de producción.

lunes, 25 de marzo de 2013

El estado nuevo (1939-1945)


Esta época estuvo marcada por la represión el exilio, el sufrimiento y la depresión. El régimen de Franco presentaba matices que lo identificaban con el fascismo italiano, sin embargo no puede considerarse un régimen fascista sino más bien reaccionario. Franco se consolidó como un factor inalterable de poder.

En cuanto a la política exterior el ministro de asuntos exteriores Gómez Jordana, optó por la neutralidad y España quedó aislada. Franco pretendía conseguir una combinación equilibrada de apoyos a la hora de elegir a sus colaboradores. En lugar de valorar la pertenencia a una determinada ideología o una familia relevante, se fijaba en la lealtad que cada miembro tenía hacia el régimen. Su gobierno estaba formado por  militares, falangistas y monárquicos. Asimismo creó una organización sindical única (sindicato vertical) con la cual pretendía acabar con la lucha de clases. En este período Serrano Suñer, miembro de su cuerpo de mando intentó dar una orientación puramente fascista al régimen, pero se encontró con la oposición de monárquicos carlistas, militares y la Iglesia. Como medida para evitar la crispación dentro del gobierno Franco sustituyó a Serrano Suñer por Carrero Blanco.

En el ámbito internacional la guerra civil española fue concebida como una primera parte de la II Guerra Mundial. En este contexto en el acuerdo de Teherán, Stalin acepta la alternativa de los Aliados de restituir la monarquía en Juan de Borbón. A esta petición, Don Juan responde con una carta a Franco pidiendo la restauración pero el Caudillo la desestimó. Finalmente, Roosevelt premió la neutralidad  de España en política exterior dotándola de garantías.

A finales de 1945, España se convierte en un país devastado. Las consecuencias de la guerra civil, y el contexto internacional de la guerra mundial provocan una depresión económica. 250.000 viviendas están en ruinas y se produce un deterioro de las infraestructuras del Estado. Desciende la producción agrícola y el régimen franquista opta por la autarquía económica, es decir, España debe abastecerse a sí misma. El hambre, el racionamiento y el estraperlo, son la realidad de la España de posguerra.

La forja de un Caudillo (II)

Segunda parte:

El primer paso para la consolidación del Estado Franquista fue la creación de un partido único que adoptó la ideología del partido de la Falange Española. Al mismo tiempo se implantó una simbología muy propia de una dictadura de corte militar. Por ejemplo, se establece el cara al sol como canto nacional, el saludo oficial pasa a ser el brazo en alto con mano extendida y se celebran numerosos acontecimientos con gran número do militares uniformados.

Simultáneamente el conflicto bélico proseguía, el bando sublevado ganó batallas gracias a su potencia militar. Recibió ayuda internacional debido a los pactos con la Alemania de Hitler y la Italia de Mussolini, mientras que las democracias parlamentarias se mantenían pasivas ante la posibilidad del estallido de una Guerra Europea.


                                                        Franco, Hitler y Mussolini


Ya por 1939 bombardea Barcelona con hidroaviones enviados desde las Baleares. La caída de Cataluña supuso un golpe moral para la República, y Madrid fue entregada por el general Casado el 28 de marzo de 1939.

En los años inmediatos al final de la Guerra, se llevó a cabo una fuerte represión. De los 10000 presos que había antes de la guerra se llegó a los 270000, aunque acabó rebajándose a 124000. 3385 personas fueron ejecutadas en la posguerra y si extendemos el período hasta 1945 podemos llegar a hablar de 50000. La represión iba encaminada mayoritariamente a aquellos que habían apoyado al bando republicano, generalmente del mundo  obrero. Pocos lograron escaparse a América u otros países europeos.

El final de la Guerra deja una España destruída, con una gran crisis y estancada industrialmente.

miércoles, 13 de marzo de 2013

La forja de un Caudillo


Primera parte:

Francisco Franco nace el 2 de Diciembre de 1882 en Ferrol en el seno de una familia de tradición militar e hidalga. El abandono de su padre marcó su infancia. De joven tenía la intención de ser marino, pero un año antes de que pueda entrar, la academia cierra, por lo que opta por entrar en la escuela de infantería de Toledo.

Paso sus primeros años como militar en África, donde adquirió su carácter meticuloso, disciplinado, conciencia política… y poco a poco se fue ganando una reputación.

Hasta haber llegado a África no era nadie en el ejército, que además apenas tenía formación, pero salió favorecido por la prensa tras sus primeras conquistas en África. Fue clave su campaña en el Riff en 1923.
En el 33 es nombrado asesor del ministerio durante el gobierno de la CEDA y el Partido Radical.

Más tarde fue destinado en Oviedo, donde encabeza la represión contra los mineros de 1934, y conoce a la que será su futura esposa, Carmen Polo. Es ascendido a Coronel.

 Franco recibe el 18 de Julio de 1936, la noticia del pronunciamiento que se había dado el día anterior en Melilla y vuela en el Dragón Rapide hasta Tetuán, donado por Juan March, un empresario catalán derechista.

La rebelión no estaba marchando según lo previsto. Los republicanos habían bloqueado el Estrecho lo que impedía el paso del ejército africanista (clave para el triunfo del pronunciamiento). Franco rescata viejos contactos italianos y alemanes y recibe ayuda aérea que ayudan al ejército a cruzar el estrecho.
Sanjurjo, que debía dirigir el pronunciamiento muere en un accidente de avioneta al volver de su exilio en Portugal (aunque no hay pruebas concluyentes, se cree que pudo ser una maniobra de Franco para eliminar posibles enemigos posteriores en la lucha por el poder.

Franco planifica entonces el avance hasta Madrid desde el Sur, y nombra al general Yague al frente de esta Columna de Madrid. En este avance tiene especial relevancia la devastadora represión llevada a cabo por el bando sublevado al llegar a Badajoz, que acaba con la vida de aproximadamente 4000 personas.

La columna avanza hasta Talavera, pero en vez de atacar Madrid frontalmente se desvía para tomar el Alcázar de Toledo, donde estaba refugiado el general Moscardó con unos cuantos sublevados. Esta toma se convirtió en un hecho simbólico, tras ella la Junta de Burgos le nombra generalísimo y jefe del Estado Mayor.


Con ello comienza propiamente la formación del Estado franquista.