El régimen de Franco permaneció inalterable a cualquier suceso externo, como el de la guerra fría. Con esta guerra, la dictadura franquista fue considerado un aliado de Europa, ya que los fascistas eran perdonados con tal de que fuesen anticomunistas. Aunque primeramente los EEUU se negaban a que Franco participase en las decisiones, tras la inminencia de la guerra de Korea, accedieron a considerarlo aliado.
El régimen fue respaldado por la Iglesia, porque durante la República la Iglesia se vio afectada duramente por un anticlericalismo muy fuerte. La Iglesia española se distanció de la europea, pues el Vaticano consideraba que los españoles mezclaban los asuntos religiosos con los ideológicos. Los clérigos más rebeldes a la causa de Franco eran los vascos y catalanes. Tanto Franco como Pío XII se mantuvieron intransigentes a esta muestra de rebeldía.
Los nazis quisieron realizar un pacto cultural con España pero los españoles se negaron al considerarlo una humillación de la conciencia religiosa porque Alemania tenía poca conciencia religiosa. En España la educación se regía en los valores cristianos. Ante la creciente inestabilidad con el Vaticano, se efectuaron numerosos tratados para evitar todo conflicto con lo que Franco logró una de sus objetivos: nombrar obispos.
La situación de aislamiento por parte de España hacia el resto del mundo hizo que Franco contactase con el Vaticano y con los EEUU para establecer numerosos pactos. Los pactos con los Estados Unidos hicieron que la moral republicana cayese en picado. Uno de ellos consistía en permitir el establecimiento de cuatro bases militares en España a cambio de multitud de ventajas. A los falangistas esto no les gustaba demasiado, pero Franco les ignoró al tener un papel sumamente secundario. Tras esto se levantó la sanción que impedía que España colaborase con la ONU y el resto de organizaciones relacionadas. Además de la importancia de EEUU, también la tuvo la ayuda argentina y el acercamiento de los países árabes.
Franco con el presidente de EEUU, Eisenhower